viernes, 20 de mayo de 2011

Crónica SOS 4.8 2011: Sábado

  • Standstill fascinó un abarrotado auditorio.
  • Lori Meyers y Chk Chk Chk grandes triunfadores de la noche.



Nuestro sábado comenzó mucho antes que de costumbre gracias a la estupendísima idea de acercar el festival al centro de la ciudad. Los catalanes Mujeres ofrecieron un magnífico recital de garage-rock en una llenísima plaza de las flores. El ambiente que había en la zona ayudaba a olvidar la resaca y a ver la ciudad mucho más metida en el SOS. Sin duda uno de los aciertos de la organización este año.

Poco después de comer nos acercamos al recinto donde pudimos confirmar nuestras sospechas: Nos íbamos a perder a Patti Smith, quedaban horas para que abrieran los conciertos, pero la cola infinita daba varias vueltas a la zona de descanso del SOS Club, al poco la cola se disolvió, pues se habían agotado las entradas. Sí pudimos coger entradas para el Room de Standstill.

Aunque el slot que le ofrecieron a Caribou DJ no era el más acertado (¿En qué cabeza entró la idea de ofrecerlo de día?) lo cierto es que el final de hitazos de los valencianos ElyElla Djs y la estupenda sesión de Snaith resultaron casi casi perfectas. Si el viernes Manel fue una subida creciente de ritmo, Caribou nos metió de pleno y sin preguntar en la esencia del festival. Una sesión donde cupo todo tipo de bailes electrónicos desde lo más tradicional a lo más ecléctico, y donde no faltaron varios de sus propios temas. Nuestra curiosidad se alargó al punto de perdernos tanto a Hola a todo el Mundo como a White Lies.

Directos a por Standstill Room y con el subidón electrónico en la sangre accedimos al auditorio que ya presumía lleno. No tardó en comenzar uno de los espectáculos más bonitos que he podido ver en un festival. Emociones perfectamente transmitidas de forma audiovisual en un inolvidable y excelente concierto.
Habíamos oído hablar mucho del show de Adelante Bonaparte desde el Primavera Sound 2010, y nunca hasta ahora habíamos podido disfrutar de él pese a nuestra devoción por la banda. Durante el Room pensé varias veces que los pocos euros que costaba el festival estaban ya amortizados sólo con esta hora y media de música.



Nuestra próxima parada también se alejó de lo que parecía lógico porque nos avisaron de un retraso en Suede, así que tendimos a esperar el concierto de Chk Chk Chk.
En nuestra bilbia festivalera hay una frase que dice claramente que si !!! está en el cartel, hay que ver a !!!, ésta no fue la excepción que nos hizo tacharlo, encontramos un Nic Offer en pantalones cortos y camisilla que se comió el escenario desde el primer minuto hasta que se colocó una americana de luces y se llegó a lanzar al público de un lateral. Sin parar de bailar ni un solo segundo el público pudo disfrutar de casi todo su último álbum, aunque muchos echaron de menos algunos hits pasados, pasó desapercibido ante tal desfile de agitación.

Aunque los grandes triunfadores del día fueron los chicos de Lori Meyers, que llegaron a llenar el escenario Estrella Levante más que ningún otro grupo en el festival en 2011 pese al tardío horario y consiguieron hacer que las más de 30.000 personas que allí estaban cantasen a coro sus temas de "Cuando el destino nos alcance", pero también las mejores de los discos viejos, algo que nos sorprendió gratamente y nos recordó (salvando las enormes masas de gente) a nuestras primeras experiencias con ellos.
El último concierto que vimos de Lori Meyers había sido un poco fatídico por el pésimo sonido que limitó el ayuntamiento de Valencia, pero aquí demostraron que son tan grandes en directo como en número de ventas.

El escenario, como ya pasó en años anteriores con Franz Ferdinand se quedó pequeño, y tras la torre de sonido no se llegaba a disfrutar con la misma intensidad, al igual que pasó en el escenario prqueño con Two Door Cinema Club o el año anterior con Crystal Castles. Las limitaciones del recinto son las que son, y aquí el festival tendría que mirar una forma más capaz de organizar los escenarios, aunque eso implique meter menos gente.



Todo el optimismo que llevábamos de Caribou, Standstill, Chk Chk Chk y Lori Meyers voló con los Zombie Kids que pecaron de ostentar el lugar que tenían en el cartel. Ofrecieron un sucio e inconexo repertorio de temas, que solo contentaba las pupilas dilatadas. Tuvimos la sensación que los Zombie Kids dieron demasiado parloteo y poca sesión para lo que conocemos de ellos. No obstante sabemos del talento que tienen y confíamos que en próximos festivales ofrezcan más música y menos espectáculo drug-friendly.

En ese momento nos dimos cuenta de otra de las pegas del festival, no eran ni las 3 A.M. y ya no había absolutamente ninguna alternativa pop en todo el recinto, en el SOS Club, 2PiasDj y Eme sacaron sus bilbiotecas más zapatilleras cumbieras, tropicales y moombahton, y en los escenarios sólo había opción de Tiga o Zombie Kids y Crookers. No estaría de más que el año que viene el SOS Club dejará a los djs más poperos para altas horas, dejando los electrónicos para cuando los escenarios grandes no tuvieran este tipo de opción musical. La idea de Lori Meyers a altas horas funcionó perfectamente, y podría haber seguido la fiesta ofreciendo alterativas de todo tipo como sí se hizo el viernes con Amable.
Suponemos que la organización poco tuvo que ver pues la oferta de Djs era bastante pop, pero si a las 19h00 ya había música electrónica, muy difícil sería bajar el ritmo para los djs posteriores.

Salimos del recinto con esa sensación que te dice que volverás en 2012, hastiados de bailar tralla, reconociendo los aciertos y pensando en los errores rodeados del principal error del festival: gran parte de su público.
Pensando que el Sábado había sido casi un pleno de aciertos y gritando que el festival había estado a la altura, superado todas nuestras expectativas.

  • Nota general: 7

Fotos: Underscoreweb, Alvarodriguez2 en el flickr del festival.

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